La Asociación Nacional de Gestores de Residuos de Automoción (ANGEREA) ha mantenido una reunión con el Jefe del Departamento de Residuos y Calidad del Suelo de la Delegación Provincial de Málaga, D. Ricardo Ruiz. En dicha reunión ANGEREA ha puesto de manifiesto los problemas a los que se enfrentan las empresas gestoras de residuos que operan en la provincia ante el retraso que sufren en el otorgamiento de los código NIMA  las empresas productoras de residuos.

El NIMA (Número de Identificación Medio Ambiental) es el código que identifica a cada uno de los centros registrados como productores y/o gestores de residuos peligrosos. Cualquier centro  que gestione o produzca residuos, como pueden ser los talleres de reparación de automóviles, debe estar en posesión de un código NIMA asignado por su Comunidad Autónoma. De la misma manera que un NIF va asociado a una empresa, el NIMA va asociado a un centro.

El NIMA es el código que identifica inequívocamente todos y cada uno de los centros registrados como productores y /o gestores de residuos ante la Administración pública y entidades privadas con las que participe el centro permitiendo así el control e intercambio electrónico de datos entre todos los actores participantes en la gestión del residuo. Para ello, la normativa actual vigente establece que de forma obligatoria este código debe figurar en toda la documentación de control de los residuos, incluidos los documentos de control de traslado de estos residuos desde el centro productor hasta una instalación de gestión de residuos.

El retraso existente de varios años a día de hoy, provoca que a efectos de la normativa actual a estas empresa no se les puede realizar un correcto  control documental  de los residuos que generan.

A su vez, a  las empresas gestoras de residuos les supone una tremenda incertidumbre legal, ya que están gestionando los residuos de los centros productores de forma correcta según establece la normativa pero  al no disponer estos de un   NIMA, la tramitación administrativa que conlleva la gestión de los residuos se hace de forma incorrecta.

Esta situación conlleva que muchos de los residuos que se producen en los talleres como por ejemplo son las baterías usadas, los cuales son recursos valorizables, que al no existir un nivel de control e inspecciones suficiente por falta de registros documentales provoca que en muchas ocasiones terminen siendo recogidos por gestores ilegales que no solicitan ningún tipo de documentación administrativa a los centros de producción. Esto desemboca en ocasiones en  una competencia desleal y un comercio ilegal de residuos el cual  lleva intrínseco un grave peligro para el medio ambiente y para la salud humana ya que estos residuos suelen terminar abandonados sin control alguno.

Por todo ello, ANGEREA ha expuesto la necesidad de que al Departamento de Residuos y Calidad del suelo de la Delegación Provincial de Málaga se destinen más recursos para la agilización de este trámite. También ha puesto de manifiesto la importancia que tiene la inspección y el control para todos los productores y operadores de residuos, de forma que se eviten prácticas ilegales y competencia desleal.

Por último, ANGEREA ha mostrado su total colaboración en su deseo de seguir siendo la referencia en la gestión de residuos de automoción en la provincia andaluza.